Ventajas de las metodologías ágiles en la implantación de software para empresas

Actualmente, y como indica el informe Pulse of the Profession de Project Management Institute, más de un 71% de las empresas mundiales usan de alguna forma u otra metodologías ágiles en sus proyectos. Parece que esta cifra irá en aumento, y que el futuro va a ser más Agile, como predicen en el State of Agile Report del 2020. Además, la pandemia también ha demandado más agilidad en las empresas, para hacer frente al nuevo contexto empresarial.

En este artículo te explicamos en qué consiste la metodología agile y qué ventajas tiene en la implantación de software para empresas.

¿Qué son las metodologías ágiles?

Seguramente has oído hablar de las metodologías ágiles, también conocidas como metodología Agile. Se trata de un tipo de proceso de gestión de proyectos, usado habitualmente para el desarrollo de software, en el que las necesidades y soluciones evolucionan y se valora la fluidez de los procesos de trabajo.

A continuación te explicamos las ventajas de hacer una gestión de proyectos usando metodologías ágiles.

7 ventajas de usar la metodología Agile para la implantación de software para empresas

Mayor flexibilidad y versatilidad

Cuando se trabaja con la metodología Agile, no hay un patrón preestablecido, sino que se trabaja con flexibilidad, ajustándose siempre a las necesidades del cliente. Esto permite responder de forma rápida a estas necesidades variables, haciendo los cambios necesarios, en función de las prioridades establecidas en cada fase del proyecto. Además, el hecho de establecer prioridades permite ver resultados tangibles desde el principio.

Transparencia y mayor satisfacción del cliente

El proceso en la metodología Agile es totalmente transparente, y el cliente se ve involucrado en todo el proceso. Por ello, observa todos los cambios y mejoras que se van introduciendo en el proyecto. La interacción constante entre cliente y empresa permite modular el producto de tal forma que se ajusta exactamente a las necesidades del cliente, cosa que aumenta su satisfacción.

Mayor implicación y motivación del equipo

Los trabajadores de un equipo se sienten más involucrados en el proyecto, ya que están informados de todo el proceso y del estado del proyecto. Además, en la metodología Agile se potencia la creatividad y la innovación en los equipos. Esto aumenta su implicación y su motivación, lo que lleva a obtener un trabajo más eficiente.

Trabajo colaborativo

En la metodología Agile se distribuye el trabajo por equipos, y los encuentros para ver la evolución del proyecto son frecuentes. Por lo tanto, hay un traspaso constante de información sobre el proceso, cosa que ayuda a mejorar la comunicación interna.

Reducción del coste y del riesgo de los proyectos

La evaluación continua del proyecto y el desarrollo por etapas permite identificar posibles errores e ir corrigiéndolos. Por lo tanto, esto permite construir el proyecto sin errores y hacer los cambios necesarios antes de tener el producto terminado (con toda la inversión que esto supone).

Mayor calidad del producto

Gracias al trabajo más efectivo de los equipos, se construye un producto con altos estándares de calidad. Además, la revisión constante del proyecto, tanto por parte del equipo como por parte del cliente, ayuda a corregir errores y a mejorar la calidad del producto.

Mayor capacidad de predicción

Como ya hemos comentado, el proyecto está en constante revisión, por lo que mejora la capacidad de predicción tanto en tiempo como en costes. Además, el hecho de establecer etapas (conocidos como “sprints”) ayuda a planificar mejor el proyecto.

Ahora que ya conoces las principales ventajas de trabajar con la metodología Agile, puedes empezar a mejorar la gestión de proyectos con metodologías ágiles. Y si aún no lo tienes claro, no te preocupes, porque desde Software Selección estamos a tu disposición para ayudarte a hacerlo.